Lydia Cacho Plan B 29 de septiembre de 2008 |
¿Por qué creerle a García Luna? |
Afis atacados por su creador en un momento que exige solidez de los cuerpos de seguridad e inteligencia |
Mientras México se sume en una guerra abierta contra el narcoterrorismo quedamos estupefactos al ver a los agentes federales de investigación, los afis, atacados por su creador. En un momento que exige solidez de los cuerpos de seguridad e inteligencia, Genaro García Luna, padre de la AFI y hoy secretario de Seguridad Pública federal, eligió abrir violentamente un flanco en su batalla contra la PGR y su brazo operativo, la AFI. El procurador Eduardo Medina Mora se lava las manos aduciendo que es un problema laboral. Pero lo que subyace es mucho más que la simple fusión de los cuerpos policiacos. Los argumentos de García Luna hoy contra la AFI son los mismos que utilizó en 2001 para desaparecer a la Policía Judicial Federal. La ineficacia, la corrupción y la falta de vinculación interinstitucional. La diferencia es que la AFI es su propia creación multimillonaria. En julio de 2004, García Luna, entonces coordinador general de la AFI, declaró: “La investigación, formación y operación policiaca en México enfrenta un rezago de 30 años”; aseguró que formaría cuadros para combatir el crimen mediante la inteligencia y la tecnología. El modelo de la AFI, aseguró, es de alta inteligencia porque se detectan infiltrados mediante métodos de control blindados. “Estamos patentados”, presumió el mismo que ahora intenta pulverizar al equipo que hace cuatro años era “lo mejor en inteligencia, un modelo tipo FBI inspirado en las policías de Alemania, Francia, España y Estados Unidos”. Una declaración constante de García Luna de 2001 a 2005 fue que la multimillonaria inversión para crear la AFI estaba protegida en un marco legal sólido; que en 5 años estaría desplegado en todo el país combatiendo al crimen del lado de la sociedad. Presumió el número de bandas de secuestradores atrapados en 2003... ¿Le suena? El 16 de febrero de 2005, García Luna declaró que la AFI era “una policía de exportación”. En septiembre de 2008 destruye a su criatura. Hay afis corruptos, es cierto, pero también los hay honestos, con licenciaturas en sicología, derecho y sociología, entrenados en España, Israel y Estados Unidos. Cientos de especialistas “de exportación” van a ser destituidos de la AFI con el mismo rasero. Las y los criminólogos, victimólogos, especialistas en desactivar al crimen organizado, a movimientos terroristas y guerrilleros, los grupos élite de federales expertos en inteligencia, se convirtieron de la noche a la mañana en personas desechables, non gratas. Hace días se avisó a la AFI que deben renunciar a su antigüedad; entrarán como novatos a la PFP. Les darán toletes y escudos y los usarán como “carne de cañón”, aseguran agentes especializados en inteligencia e intercepción aérea. ¿Qué pasó con su sistema blindado? ¿Por qué habremos de creerle ahora a García Luna? Entendemos que es inaceptable la participación de algunos agentes en grupos criminales; sin embargo, debemos preguntarnos si el Presidente le dio el puesto a García Luna por haber creado al FBI mexicano (léase AFI) y ahora resulta que él dice que su mérito es un rotundo fiasco. ¿Cómo asegurar que este nuevo intento no lo será? Lo más grave es que Calderón le entrega, en el momento menos indicado, un cheque en blanco al principal responsable del gran fracaso en seguridad nacional en los últimos años. ¿Por qué? |
lunes, 29 de septiembre de 2008
Universal: Lydia Cacho
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