jueves, 3 de abril de 2008
Jornada: Astillero
Astillero
Julio Hernández López Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
■ Otro ritmo
■ Felipe, silencioso y elusivo
■ PRI, agiotista político
Felipe Calderón no pudo sacar adelante por sí mismo la reforma energética a la que apostó cuanto pudo. De entrada tuvo graves errores de cálculo político, menospreciando la capacidad de respuesta que podría tener el segmento social que obviamente se opondría a esas reformas y obstinándose, en términos más pasionales que políticos, en instalar a un político de quinto nivel como jefe de la política interior y como operador, entre sabidos conflictos de intereses, de las negociaciones para abrir las puertas de Pemex a capitales privados. Todo cuanto ha sucedido era previsible, pero una infundada soberbia ha cegado a los ocupantes de Los Pinos, les ha desprovisto de los discutibles méritos de oficio político que pudieron haber tenido y les ha llevado a una situación diezmada en la que su única asidera para avanzar es el clavo ardiente del beltronismo, que practica con ellos una forma de agiotaje político.
Calderón ha sido incapaz siquiera de presentar una iniciativa de reformas legislativas sobre la materia, fugitivo de sus propias promesas, súbitamente dialogante y aparentemente reposado cuando semanas atrás creía tener una maquinaria apabullante para avanzar de un golpe en la conquista de los tesoros de aguas profundas que publicitó en medios electrónicos como urgencia inaplazable. Felipe el Silencioso podría llamársele, pues le ataca sin remedio una mudez política en cuanto un problema sube de tono: nada ha dicho respecto a su favorito, el tierno Juan Caído Mouriño y las probadas acusaciones de que ha violado las leyes al actuar en beneficio de empresas familiares desde puestos públicos; tampoco quiere enfrentar las acusaciones taimadas de sus presuntos socios del PRI que ahora le exigen que asuma los costos políticos de presentar una iniciativa de reformas en materia de energéticos y que no decline a una de sus facultades de gobernar (en días pasados, el candidato del PAN a presidir la República –sí, el tecleador ya sabe que estamos en 2008, pero el lic. F.C. todos los días se comporta como aspirante a llegar al poder– dejó saber que él no negocia con el narcotráfico, sin decir más –nuevamente mudo– respecto a esas propuestas de arreglo que le habrían hecho ¿quiénes, a través de qué conducto, en qué términos, con qué consecuencias ante un sí o un no?)
Felipe prefiere callar o, en el mejor de los casos, eludir. Ayer, por ejemplo, reunido con empresarios, señaló que “frente a la tentación de eludir los problemas para evitar los costos políticos, mi gobierno ha optado claramente por enfrentar los problemas del país y resolverlos”. No, pos sí. ¿Y la Cheyenne (la iniciativa), apá? Ante el Consejo Mexicano de Hombres de Negocios también dijo que el “reto” de “fortalecer a Pemex” sólo podrá lograrse si se discuten “con objetividad, con base en datos reales” las alternativas disponibles. “Por eso es necesario que se analice con seriedad el diagnóstico (…) que se presentó el pasado domingo”, añadió.
Pero resulta que el tal diagnóstico ha resultado peor que la enfermedad. Los doctores Kessel y Reyes Heroles júnior dieron a conocer un mamotreto lleno de generalidades y recetas básicas que no levantó el ánimo ni de sus propios presentadores y que ayer mismo fue acribillado por los priístas (que han olido la sangre de la presa en fuga), quienes lo tacharon de incompleto, falso, alarmista e indigno de ser apoyado. De esa debacle documental ha emergido la egregia figura del sonorense que hoy cogobierna el país, M.F.B., quien trata de llevarse al baile al michoacano enmudecido y su banda desafinada, proponiendo “autonomía” al tal Pemex y la instauración de un consejo que defina políticas sobre hidrocarburos. El precandidato presidencial priísta ha insistido en establecer un jefe de gabinete para que el partido de tres colores asuma parte del poder que sabe no ejercen los Pet Shop Boys de Los Pinos; también ha intentado que se establezca un consejo para manejar los recursos de la política social.
Cierto es que el olor a pólvora se ha diluido ante el hecho de que los detonantes básicos han sido pospuestos: mientras no se presente la famosa iniciativa nonata, y se opta por la treta del “diálogo” y “análisis”, tampoco hay resistencia civil pacífica. Pero los apetitos desatados por el botín de la privatización no desistirán tan fácilmente; las pifias terribles del equipo calderonista están en vías de ser corregidas por el “colmillo” del priísmo legislativo (Beltrones y Gamboa) y en cuanto vuelvan a darse acuerdos (encarecidos por las circunstancias) entre el PRI usurero y el PAN menesteroso se presentarán propuestas que, se dirá, estarán bendecidas por el diálogo y el análisis que con toda calma se hubiese realizado. Lo importante, para el segmento que se ha organizado para enfrentar tales privatizaciones, será mantener unidad y capacidad de acción, tomando muy en cuenta lo que se ha logrado a pesar de las condiciones adversas, del bombardeo mediático en contra, de las divisiones del perredismo y la difusión tácticamente magnificada de sus miserias electorales. Esa movilización (las brigadas y comités) y el anuncio firme de acciones de confrontación con lo institucional y su legalidad facciosa, han dado un triunfo condicionado en la primera batalla, pero la guerra por la defensa del petróleo no ha terminado.
Astillas
El sacristán de Jalisco, Emilio González Márquez, destinará mucho más que los 90 millones de pesos originalmente anunciados para la construcción del Santo Erario (pronúnciese santuario) de los Mártires Cristeros. Con una inyección económica de 2 mil millones de pesos, el gobierno estatal pretende convencer al Vaticano de que el gobernador real, Juan Sandoval Íñiguez, debe ser mantenido en el cardenalato ejecutivo aunque haya cumplido 75 años la semana pasada y esté en condición de pasar a retiro… Y, mientras Elba Esther arregla en Los Pinos la continuidad de su cacicazgo, ¡hasta mañana, con el góber precioso viendo a uno de sus cercanos, el presidente municipal de Izúcar de Matamoros, siendo juzgado en Estados Unidos por narcotráfico!
Jornada: PEMEX
■ Senadores perredistas proponen crear una comisión de la verdad
Pláticas del FAP con el gobierno de Perú para aclarar el caso Repsol
Andrea Becerril
Los legisladores del Frente Amplio Progresista (FAP) “no van a soltar” el caso Repsol y llevarán a cabo las gestiones necesarias hasta lograr que se cancele el contrato multimillonario que el gobierno de Felipe Calderón concedió a la empresa española para que revendiera gas a México. El senador perredista Ricardo Monreal reveló que han iniciado pláticas con autoridades de Perú, para terminar de desenmascarar “ese gran atraco a la nación”.
Adelantó que su fracción llevará hoy ante el pleno senatorial la propuesta de integrar una comisión de la verdad que investigue a los responsables de los diversos quebrantos que ha sufrido Petróleos Mexicanos (Pemex), sobre todo en el pasado sexenio foxista y en lo que lleva “el gobierno usurpador”.
Monreal detalló que sólo esperan que pasen los 45 días que la ley otorga a las empresas públicas para subsanar irregularidades, a fin de solicitar a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y a las dos cámaras del Congreso que presenten denuncias civiles y penales a fin de lograr la revocación o cancelación de ese contrato otorgado a Repsol por 21 mil millones de dólares, en el que hay tráfico de influencias y precios elevados y simulados en contra de Pemex y de la nación mexicana.
Insistió en que la investigación que llevó la propia ASF corrobora que la denuncia formulada un día antes por Andrés Manuel López Obrador tiene sustento. “Nosotros vamos a darle seguimiento en el FAP, a fin de que se integre una comisión de la verdad, ya que no puede pasar desapercibida toda la corrupción que hay detrás de esa operación”. Insistió en que se trata de un negocio “extremadamente redituable para Repsol, donde presumimos que hay funcionarios públicos involucrados”.
Explicó que en breve viajará a Perú a fin de recopilar mayores datos sobre la operación, ya que se hubiera podido contratar directamente con el gobierno de aquella nación, en lugar de comprar el gas a una trasnacional que actúa como intermediaria o incluso revendedora.
Dijo que es absolutamente falsa la aseveración del director de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub, de que en la operación con Repsol se obtuvieron ganancias por mil 500 millones de dólares. “Vamos a demostrar que la empresa española obtuvo una ganancia desmedida, porque ni es productora de gas y sólo actuó como intermediaria del gobierno de Perú en un gran fraude en el que están involucrados funcionarios voraces, entre ellos el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño”.
Se requiere esa comisión, insistió, para dejar en claro quiénes son los responsables de la situación crítica que enfrenta Pemex, y que ha sido pretexto para que “el gobierno usurpador” insista en que no hay otro camino que privatizarla. Se debe investigar, detalló, lo ocurrido durante el pasado sexenio en el que de manera contradictoria se obtuvieron los mayores ingresos por la venta de petróleo debido al alza creciente en el precio del crudo.
El Pelele y su jefes
■ El CMHN pide que Ejecutivo y Legislativo lleguen a acuerdos en pro de una reforma petrolera
Yo no eludo problemas, los enfrento, asegura Calderón a los empresarios más ricos del país
■ Cierran filas y ofrecen invertir este año 23 mil 600 mdd y dar empleo a un millón 300 mil personas
Claudia Herrera Beltrán
El presidente Felipe Calderón intentó salir al paso de las críticas que ha generado la indefinición gubernamental en torno a la reforma energética, y señaló que en vez de eludir los problemas para evitar costos políticos, ha optado claramente por enfrentarlos y resolverlos.
Así lo hizo reunido con integrantes del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios (CMHN) que en voz de Claudio X. González, llamó al Legislativo y al Ejecutivo a que, a partir del diagnóstico del gobierno , federal sobre Petróleos Mexicanos (Pemex), ambos poderes lleguen a acuerdos en pro de una reforma petrolera.
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En la residencia oficial de Los Pinos, 21 de los 37 integrantes de este selecto club empresarial –entre los que se encontraban Carlos Slim Domit, presidente de Telmex; Emilio Azcárraga Jean, dueño de Televisa, y el banquero Roberto Hernández– hicieron un cierre de filas en torno al panista y anunciaron que este año invertirán 23 mil 600 millones de dólares y darán empleo a un millón 300 mil personas. Todo ello, como muestra de confianza en el país cuando la economía mundial atraviesa por momentos de “incertidumbre”.
En la residencia oficial de Los Pinos, 21 de los 37 integrantes de este selecto club empresarial –entre los que se encontraban Carlos Slim Domit, presidente de Telmex; Emilio Azcárraga Jean, dueño de Televisa, y el banquero Roberto Hernández– hicieron un cierre de filas en torno al panista y anunciaron que este año invertirán 23 mil 600 millones de dólares y darán empleo a un millón 300 mil personas. Todo ello, como muestra de confianza en el país cuando la economía mundial atraviesa por momentos de “incertidumbre”.
Preparado el terreno con la comida del día anterior, efectuada también en Los Pinos, la mayoría de los dueños de las empresas más poderosas del país acudieron a la reunión con el Presidente, la cual se desarrolló primero en privado durante media hora, y luego se hizo ante la prensa.
En el salón Manuel Ávila Camacho de la residencia oficial, y en torno a una mesa en forma de U, estaban Daniel Servitje Montull (Bimbo), Eugenio Garza (Xignax), Alfredo Achar (Comex), Antonio Chedraui (Grupo Chedraui), Valentín Díez Morodo (Cervecería Modelo), Agustín Franco (Infra), Bernardo Quintana (ICA), Fernando Senderos (DESC), Gastón Azcárraga (Grupo Posadas) y Alberto Bailleres (Bal).
La lista se completó con Antonio del Valle (Mexichem), Pablo Escandón Cusi (Nadro), Carlos González Zabalegui (Comercial Mexicana), Antonio Madero (Corporación San Luis), Federico Terrazas (Cementos de Chihuahua), Agustín Santamarina y Emilio Carrillo (bufete Carrillo Gamboa).
Con el anuncio de las inversiones para este año como telón de fondo, Claudio X. González se mostró confiado en que las decisiones importantes, como la concerniente a energía e hidrocarburos, sean enfrentadas con “certeza, coraje y visión de futuro”.
Es imprescindible, planteó, que a partir del diagnóstico presentado sobre industria energética haya acuerdos para que México cuente con una industria petrolera moderna, eficiente y capaz de desarrollarse competitivamente, que ayude a acelerar el crecimiento del país.
Las palabras del presidente de Kimberly Clark dieron la pauta para que Calderón hiciera un nuevo señalamiento en torno al petróleo, en momentos en que es ampliamente criticado por el coordinador del PRI en el Senado, Manlio Fabio Beltrones, por no enviar su reforma energética al Congreso de la Unión.
El michoacano rechazó que esté eludiendo los problemas del país y también advirtió que la soberanía de la patria se defiende fortaleciendo a Petróleos Mexicanos para que sea “una empresa orgullosamente mexicana que nos permita aprovechar cabalmente nuestros recursos petroleros y una empresa, por supuesto, ciento por ciento propiedad de los mexicanos y del gobierno”.
Flanqueado por el secretario de Economía, Eduardo Sojo, y el jefe de la Oficina de la Presidencia, Gerardo Ruiz Mateos, reiteró su llamado para que se analice con seriedad el diagnóstico sobre la situación de la paraestatal, presentado el domingo pasado.
Minutos antes, el presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios expresó que en 2000, ese organismo había hecho un compromiso similar de inversión, pero la cifra de entonces fue de 8 mil 500 millones de dólares y el número de empleos de 807 mil, lo que significa que en 2008 dichos montos son 2.7 veces más altos que entonces.
Y dirigiéndose a Calderón, señaló que es el “líder electo por la nación para señalarle rumbo en sus aspectos políticos, económicos y sociales”, mientras los empresarios están obligados a contribuir para generar crecimiento y abatir así, en el menor plazo, los índices de pobreza y desigualdad que “desgraciadamente todavía nos afligen”.
Tras resaltar que encabezan a las “compañías de mayoría de capital mexicano más importantes del país”, remarcó que la situación económica mundial para 2008 no es halagüeña por la incertidumbre creada en los mercados financieros del exterior.
Elogioso con Calderón, González aseguró al final de su mensaje que el país está preparado para enfrentar estas adversidades gracias a las medidas tomadas por el gobierno, y ofreció el respaldo de los empresarios para lograr más crecimiento económico, mayor inclusión social y un México ganador.
Como colofón del encuentro, el Presidente caminó hacia los empresarios y se despidió con cordialidad de cada uno.
Con quien conversó más tiempo e intercambió sonrisas fue con Azcárraga Jean quien, a diferencia de los otros magnates, salió de Los Pinos manejando él mismo un automóvil Mercedes Benz Kompressor negro, seguido por sus escoltas en otro vehículo.
Jornada: PEMEX
■ Azorados, Kessel y Reyes Heroles recibieron recriminaciones
Vapuleo de priístas al diagnóstico sobre Pemex
■ “Nos presentan una visión catastrofista de la paraestatal con verdades a medias, cuyo contenido ofende la inteligencia de los mexicanos”
Roberto Garduño
Con azoro, la secretaria de Energía, Georgina Kessel, y el director general de Petróleos Mexicanos, Jesús Reyes Heroles, escucharon la andanada de críticas al texto de parte de los legisladores priístas. Ambos funcionarios coincidieron, mediante respuestas lacónicas, en que la administración panista no pretende privatizar la industria petrolera, que el problema fundamental de la paraestatal no radica en el terreno financiero, sino en la urgencia de hacerla productiva para beneficio de los mexicanos.
De inicio a fin, la secretaria y el director general escucharon observaciones severas, críticas y señalamientos descalificatorios al gobierno. La reunión se inició con una larga exposición de Kessel, quien intentó sensibilizar a los priístas sobre la urgencia de explorar –vía asociaciones con empresas extranjeras– las aguas profundas del Golfo de México, y del compromiso de no privatizar la industria petrolera.
En la ronda de preguntas y respuestas, los diputados del PRI emprendieron un agudo análisis del documento. Carlos Rojas Gutiérrez afirmó que las autoridades refieren una reforma energética, y por el contrario, no se dice nada de una política de Estado en la materia.
“El estudio confirma una visión catastrofista para la actividad petrolera; esto no nos sorprende, obedece a una vieja práctica de ahogar a las instituciones para luego desprestigiarlas, y luego tratar de solucionar el problema con propuestas como las que ahora nos dicen hay que acompañar con inversión privada a Pemex. ¿Qué hicieron, qué le pasó a Pemex, cuando en el año 2000 era la empresa número seis del mundo y ahora es la undécima? ¿Qué hicieron con más de 45 mil millones de dólares de recursos de los excedentes petroleros? ¿Quién tomó esas decisiones?”
La respuesta de la secretaria careció de sustancia, pues adujo que se debe “ver la situación de la empresa el día de hoy, darle las herramientas, por eso el presidente Calderón puso a su disposición este diagnóstico”, y de inmediato pasó el micrófono a Reyes Heroles: “Se trata de un documento que apretadamente trata de resumir la situación de Pemex; estamos en la disposición de entregar más información… se ha iniciado un proceso de cambio en la dirección correcta y hay que determinar los márgenes para continuar”.
Enseguida, el ex gobernador de Oaxaca José Murat recriminó a la funcionaria: “No traten de que se dé una venta de garaje, ¡no!, cuidado con eso.
“Ustedes lo que buscan y quieren es privatizar Pemex, quieren los contratos de riesgo, que es una violación a la Constitución, y se van a ir por la ley reglamentaria para justificar esos contratos; no nos metan a un debate tramposo, no queremos que beneficien a la iniciativa privada nacional e internacional. Si para los empresarios es negocio comprar Pemex, ¿entonces debe ser negocio para el gobierno mexicano mantener a la empresa? ¿A quién quieren beneficiar? Repsol, Exxon, la Shell, están como perros sobre el negocio; hagamos un negocio para beneficio de México.”
Y sobrevino una andanada de golpes severos al diagnóstico calderonista. Gerardo Sosa también reprochó al director general de Pemex por qué no actúa como su padre:
“No sé si el director conoció al señor Jesús Reyes Heroles; él decía que en política hay que cuidar la forma, porque la forma es fondo; creo que habría que repasar la obra de este intelectual mexicano y no olvidar que la expropiación petrolera es un logro de un gobierno priísta (sic) y ahora quieren que nosotros demos la vuelta a esto”.
Quien también recriminó la estrategia de la administración federal fue Samuel Palma, porque es simplemente “el planteamiento de un problema, no un diagnóstico. ¿Qué ha pasado con los recursos extraordinarios de Pemex? ¿Qué pasó con el Instituto Mexicano del Petróleo? Hay una clara pobreza del documento que se nos presenta. Usted nos apremia en el sentido del tiempo; en los regímenes presidenciales, la práctica señala que la mayoría de las iniciativas provienen de los gobiernos. ¿Dónde está la responsabilidad del gobierno de ustedes? Esto parece ser un round de sombra, es una propuesta descompuesta”.
Descompuesta... la secretaria de Energía, quien no respondía a los reclamos y centró su defensa del diagnóstico gubernamental en posturas como la siguiente: “La problemática que enfrenta Pemex no es de índole financiera; necesitamos fortalecer la rectoría del Estado sobre los hidrocarburos; Pemex no se privatiza; sí queremos fortalecerla, no estamos pensando llevar a cabo ninguna privatización”.
Sin mediar la tersura, Beatriz Pagés replicó a la enviada del gobierno de Felipe Calderón:
“Tengo la obligación de ser muy franca, porque el tema tiene que ver con el destino de la nación: la estrategia del gobierno federal y el diagnóstico que se nos presenta insulta la inteligencia de los mexicanos, porque se nos presentan verdades a medias; tal parece que al gobierno lo único que le interesa es privatizar el Golfo de México en aguas profundas. Este diagnóstico pretende ver en el Golfo de México y en las aguas profundas una panacea.
“Se utilizó el caso cubano como una intención mediática para decir a la izquierda que en un país socialista se realizó la asociación; ¿por qué arrojar a México en la aventura de las aguas profundas?, ¿por qué lanzarlo a la aventura como si fueran los piratas del Caribe?”
Las quejas por lo inacabado del documento siguieron. Samuel Aguilar acusó que el texto se limita a un área del sector:
“El documento que ustedes dieron a conocer renuncia al planteamiento de una reforma energética; este gobierno sin decirlo ha renunciado a un planteamiento de reforma energética… ¿acaso son intelectualmente incapaces de elaborar una iniciativa de esta naturaleza?”
Mariano González Zarur señaló
que si bien el destino “no nos ha alcanzado y nosotros estamos reprobados como opositores, ustedes están reprobados como gobierno; hay que hacer un verdadero diagnóstico de una verdadera política energética en el país”.
Para Raúl Cervantes, el problema es estructural porque “el presidente Calderón es el que está manejando el país de manera incongruente. En la reforma del Estado los panistas no quieren tocar al Presidente de la República”.
Ante la crítica, Kessel respondió lacónica y terminó por aceptar la escasez de información:
“La secretaría y Pemex han venido platicando con las distintas comisiones de energía del Senado y de la Cámara de Diputados; hemos estado comentando este diagnóstico en los últimos cinco, seis meses; quisiera ser enfática: el problema de Pemex no es sólo financiero… ustedes tienen razón; para tomar una decisión de esta naturaleza se requiere información, cuenten ustedes con la secretaria de Energía…”
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