miércoles, 25 de febrero de 2009

Cartón: Hernández

Jornada: Obama



Nueva York, 24 de febrero. El presidente Barack Obama presentó hoy su caso por el rescate del sistema capitalista estadunidense ante la nación, justificando el retorno del gobierno a la escena como único salvador ante la peor crisis desde la Gran Depresión y el fin de una era donde “la riqueza se trasladaba a los ricos en lugar de… invertirla en nuestro futuro”.

A un mes de asumir la presidencia, Obama se presentó por primera vez ante una sesión conjunta del Congreso, pero aún más importante, ante el público a escala nacional (fue transmitido en vivo a todo el país por las principales cadenas de televisión) con el propósito de convencer al mundo –desde cúpulas financieras a nuevos desempleados– de la viabilidad de su estrategia para enfrentar la peor crisis económica.

El mensaje de esta noche tenía el objetivo central de convencer al público de que este rescate –su gobierno ha obtenido casi 2 billones de dólares para lograrlo– no es para los banqueros y los ejecutivos, sino para el bien común en un ambiente de creciente ira y preocupación por todo el país.

Tal vez lo más dramático es que eso implicaba proclamar que el Estado hoy es indispensable para salvar al sistema de libre mercado de sí mismo, y que se inaugura una nueva época donde el gobierno ha regresado al escenario como la solución y acaba otra donde el gobierno era considerado como el problema y el mercado libre como el rey.

Denunció las políticas y prácticas del pasado reciente –y algunas de décadas– que llevaron a detonar la crisis: “Hemos vivido en una era donde muy frecuentemente se privilegiaban las ganancias de corto plazo sobre la prosperidad de largo plazo; donde fracasamos en ver más allá del próximo pago, el próximo trimestre, o la próxima elección.

El día de enfrentar las cuentas ha llegado

Un superávit se convirtió en un pretexto para trasladar la riqueza a los ricos en lugar de una oportunidad para invertir en nuestro futuro. Las regulaciones fueron vaciadas para el bien de una ganancia rápida a costo de un mercado saludable. La gente compró hogares que sabían que no podían adquirir, de bancos y prestadores que promovieron esos créditos malos de todas maneras. Y todo ese tiempo, los debates críticos y las decisiones difíciles fueron postergadas. Y subrayó: bueno, el día de enfrentar las cuentas ha llegado, y el momento para tomar el control de nuestro futuro está aquí.

Reconoció que todo el país está consciente de la crisis y que todos están sintiendo sus efectos. Pero aseguró que mientras nuestra economía podría estar debilitada y nuestra confianza minada; aunque estamos viviendo a través de tiempos difíciles e inciertos, esta noche quiero que cada estadunidense sepa esto: reconstruiremos, nos recuperaremos, y Estados Unidos de América surgirá más fuerte que antes.

Afirmó que su estrategia para enfrentar la crisis es una agenda que empieza con empleos, y detalló su plan de recuperación a través del plan de estímulo económico, el cual generará 3.5 millones de empleos. Pero afirmó que no podrá lograrse una recuperación sin resolver la crisis financiera, y explicó que el flujo de crédito es la sangre de vida de nuestra economía.

Aseguró a los ciudadanos que sus ahorros y seguros están a salvo, pero que el crédito tiene que arrancar de nuevo, y describió los planes ya aplicados para lograrlo, enfatizando que el gobierno obligará a los bancos beneficiados por el apoyo gubernamental a rendir cuentas, y que el gobierno intervendrá directamente en los bancos principales para asegurar que sean instituciones que sirvan a nuestra gente y nuestra economía.

Reconoció que sabe qué tan impopular es la percepción de que el gobierno esté ayudando a bancos, cuando todos están sufriendo en parte por sus malas decisiones. Y prometió que no gastaré ni un solo centavo para el propósito de recompensar a un solo ejecutivo de Wall Street, pero sí haré todo lo que se necesite para ayudar al pequeño negocio que no puede pagarle a sus trabajadores o la familia que ha ahorrado y aún no puede conseguir una hipoteca. Insistió: no se trata de ayudar a los bancos, se trata de ayudar a la gente, y subrayó el papel esencial del crédito para todos.

El presidente dijo que el plan de recuperación y el plan de estabilidad financiera son los pasos inmediatos para resucitar nuestra economía en el corto plazo. Pero la única manera de restaurar plenamente la fuerza económica de Estados Unidos es hacer las inversiones de largo plazo que llevarán a nuevos empleos, nuevas industrias, y una capacidad renovada para competir con el resto del mundo.

En este contexto, Obama dijo que a la par de reducir en el presupuesto programas que son inefectivos y desperdician fondos, presentará iniciativas en su presupuesto federal para invertir en tres áreas que son absolutamente críticas para nuestro futuro económico: energía, salud y educación. En estos tres rubros ofreció objetivos que, sostuvo, son inaplazables que se lograrán por medio de amplias reformas que transformaran este país.

Obama aún goza de una especie de luna de miel a un mes de llegar a la Casa Blanca, y su capital político, a pesar de la crisis, es abundante. En la encuesta más reciente de CBS News/New York Times, más de 75 por ciento dice ser optimista sobre los próximos cuatro años con Obama al frente. A un mes de arracancar su gobierno, tiene un índice de aprobación de 63 por ciento.

Todo ello le otorga el capital político para promover sus recetas y políticas, consideran los expertos, algo notable ya que en las mismas encuestas la mayoría considera que la nación está en muy malas condiciones. Según una encuesta de CNN, casi 80 por ciento cree que el país está en apuros. En la de CBS News, 55 por ciento dice que apenas logra mantener su nivel de vida, y más de 60 por ciento está preocupado por que algún integrante de su hogar pudiera perder su empleo.

Sin embargo, las encuestas también registran dudas respecto de que las políticas actuales podrán superar la crisis de manera rápida, y existe una amplia irritación por los intentos para rescatar a las grandes empresas financieras e industriales, algo que esta noche Obama intentó abordar al diferenciar entre el apoyo a empresarios y ejecutivos, y la necesidad de un sector financiero operante y una planta industrial para el futuro económico del país.

En breves referencias a otros temas, Obama dijo que para superar el extremismo, también necesitamos vigilar la defensa de los valores que nuestras tropas defienden, porque no hay una fuerza más poderosa en el mundo que el ejemplo de Estados Unidos. En este contexto, afirmó que por ello ordenó la clausura del centro de detención de Guantánamo, y reafirmó que sin excepción o equivocación Estados Unidos no tortura.

Enfatizó la renovada disposición del país de obrar de manera multilateral frente a amenazas de seguridad, como de salud, y ante la crisis económica a nivel internacional, ya que sabemos que Estados Unidos no puede enfrentar las amenazas de este siglo a solas, pero el mundo no puede enfrentarlos sin Estados Unidos.

Convocó al pueblo a enfrentar los desafíos actuales apelando a los mitos básicos del país. El peso de esta crisis no determinará el destino de esta nación. Las respuestas a nuestros problemas no están más allá de nuestro alcance, indicó, señalando que están en universidades, fábricas, campos y empresarios del país, donde persisten esas cualidades que han hecho de Estados Unidos la fuerza de progreso y prosperidad más grande de la historia....

Pero primero, hay que rescatar a este sistema de sí mismo.

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domingo, 22 de febrero de 2009

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Cartón: Omar

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Cartón: Hernández

Jornada: Mario Di Costanzo

Antes muerto que vendido
Mario Di Costanzo Armenta

Más rápido que pronto, los directivos de Citigroup aclararon los rumores que surgieron sobre la posible venta de Banamex haciendo énfasis en que su subsidiaria en México por ningún motivo será vendida, ya que sigue siendo considerada un elemento central en las futuras operaciones de este banco estadunidense.

Y es que nadie, absolutamente nadie en su sano juicio se desprendería de un banco que opera y ha operado en nuestro país con toda clase de apoyos gubernamentales, legales e ilegales, que le han permitido obtener durante los últimos siete años utilidades por aproximadamente 80 mil millones de pesos, cifra que representa entre 15 y 20 por ciento de las utilidades mundiales de Citigroup (que tan sólo en nuestro país controla 22 por ciento del mercado).

Para corroborar lo anterior basta mencionar que en mayo de 2001 quedó registrado en la historia financiera del país como la fecha en que las autoridades financieras mexicanas permitieron la ilegal e inmoral venta de uno de los bancos más grandes de lo que alguna vez fue el sistema bancario nacional.

Así, la venta de Banamex fue la síntesis del costoso fracaso de la estrategia implementada en 1995 por el gobierno federal para rescatar a los bancos. La negligencia, la corrupción, los conflictos de intereses y el costo fiscal generado a los contribuyentes mexicanos como resultado de las acciones llevadas a cabo por el Fobaproa estuvieron presentes en la multimillonaria operación, por medio de la cual el gigante estadunidense Citigroup adquirió el Banco Nacional de México (Banamex).

La ilegalidad en el rescate de Banamex parte del hecho de que el propio trabajo de investigación ordenado por el Congreso mexicano en 1998 y conocido como Informe Mackey revela que el banco no requería de los apoyos financieros otorgados por el Fobaproa, en virtud de que su índice de capitalización (situación financiera) era aceptable de acuerdo con los estándares establecidos por las normas de esa época.

Este diagnóstico fue confirmado años más tarde por el órgano interno de control del Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB) y por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), que inclusive manifestó la necesidad de descontar 9 mil 600 millones de pesos de la deuda que el gobierno tenía con Banamex, en virtud de haber sido producto de operaciones consideradas ilegales.

Lo anterior provocó que Vicente Fox interpusiera una controversia constitucional contra la ASF para evitar que dicha suma le fuera descontada al banco. En este punto, por cierto, cabe señalar que la elaboración de esta controversia a favor de Banamex le fue encargada a Luis Mancera Arrigunaga, ex procurador fiscal y primo de quien fuera director del Fobaproa, Javier Arrigunaga.

Y es que entre 1995 y 1997 el Fobaproa le otorgó apoyos a Banamex mediante la compra de cartera (créditos chatarra), por aproximadamente 50 mil millones de pesos a valor histórico, que para mayo de 2001 ascendían a casi 80 mil millones de pesos.

Estos ilegales apoyos fueron aprobados en su momento por los integrantes del Comité Técnico del Fobaproa, entre los que se encontraban Javier Arrigunaga, entonces director del Fobaproa y quien después se convertiría en director de Operaciones de Banamex; Francisco Gil Díaz, quien años después se desempeñaría como director general de Avantel y posteriormente como secretario de Hacienda de Vicente Fox; y Jonathan Davis, quien a la postre sería designado presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y quien durante el rescate bancario fungió como tesorero de la Federación y en tal carácter, con su firma, avaló la ilegal deuda adquirida por el gobierno.

Así, ante la pasividad y complacencia de las autoridades financieras, que sólo se limitaron a señalar que nada podían hacer en virtud de que se trataba de un asunto entre particulares, el 17 de mayo de 2001 Roberto Hernández anunció la decisión de vender Banamex al gigante financiero Citigroup en 125 mil millones de pesos, mediante una operación que se llevaría a cabo a través de la Bolsa de Valores y, por lo tanto, estaría exenta del pago de impuestos.

La realidad es que a todas luces fue ilegal considerar a la operación como un asunto entre particulares, pues el gobierno había rescatado a Banamex con dinero público: luego entonces, el banco existía debido a los apoyos otorgados por el gobierno.

De hecho, al momento de su venta Banamex tenía pagarés del Fobaproa registrados en su Activo Contable por 73 mil millones de pesos (pagarés a cargo del gobierno federal y los contribuyentes). Esta cantidad representaba 58 por ciento del valor total de la venta, lo que significa que sin los pagarés del Fobaproa el grupo financiero Banamex no hubiese podido ser vendido en ese precio. O bien, que ese 58 por ciento de lo que Roberto Hernández recibió por la venta del banco debió ser para el gobierno federal y para los contribuyentes.

Sin embargo, como resultado de la operación ni siquiera se pagaron impuestos. Por ello, la venta de Banamex a Citigroup se puede considerar como el crimen perfecto, ya que los acusados (es decir, los que permitieron su ilegal rescate) se convirtieron a la postre en los jueces que debieron intervenir en la sanción de su venta. Y los asesinados, como siempre, fueron millones de mexicanos.

Vale recordar que Agustín Carstens, quien entonces se desempeñaba como subsecretario de Hacienda, fue quien tuvo la última palabra que permitió la inmoral e ilegal venta de Banamex.

Por ello, y en virtud de contar con todas las complacencias del gobierno mexicano que se ha empeñado en continuar como rehén de cuatro instituciones bancarias extranjeras, entre ellas Banamex, los directivos de Citigroup han señalado con respecto de su subsidiaria en México antes muerto que vendido.

Jornada: PIB



lveraFoto Francisco Olvera

Israel Rodríguez J.

Después de conocerse la caída del producto interno bruto (PIB) en 1.6 por ciento durante el cuarto trimestre de 2008, analistas financieros confirmaron que la economía mexicana ha entrado a una etapa de plena recesión al estimar que cuando menos en los próximos tres trimestres se registrará una contracción relevante para nuestra economía.

El consenso de los especialistas prevé que en este año el desplome del PIB oscilará entre 1.9 y 2.4 por ciento, registrándose importantes caídas anuales de la actividad industrial.

Los expertos del grupo financiero Ixe estimaron que durante los tres primeros trimestres de 2009 seguirán registrándose caídas anuales en el PIB, lo que implicaría una contracción relevante para nuestra economía durante este año.

Por su parte especialistas del grupo financiero Invex prevén que la contracción en la economía en este año será cercana a 2 por ciento (1.9 por ciento). El crecimiento anual (1.3 por ciento) se ubicó en línea con nuestro estimado; sin embargo, la tasa trimestral anualizada (menos 1.6 por ciento) sorprendió fuertemente a la baja. Si estimábamos una contracción, pero no tan pronunciada. El hecho de que la actividad haya caído a tal velocidad de un trimestre a otro sugiere que la economía del país atraviesa por una situación preocupante, advirtieron.

Debilidad económica

Los expertos del grupo Financiero Banamex, filial del global Citi, comentaron que estas cifras confirman una importante contracción de la actividad económica en el último trimestre de 2008, con una caída de 10.3 por ciento en la tasa trimestral anualizada, en contraste con el incremento de 1.6 por ciento durante el trimestre previo.

Estimamos que la debilidad de la actividad económica persista durante 2009, debido a la crisis global, y en particular la recesión de Estados Unidos, por lo cual reiteramos nuestro pronóstico de una contracción del PIB de 2.4 por ciento en el año.

Los datos económicos siguen en terreno negativo y confirman la debilidad de la economía mexicana. Por ejemplo, el resultado de la producción industrial en México al mes de diciembre de 2008, dado a conocer durante la semana pasada, reflejó un retroceso anual de 6.7 por ciento (octavo mes consecutivo a la baja), caída mayor al pronóstico del mercado situado en menos 5.70 por ciento.

La caída total de 2008 para el sector industrial fue de 1.30 por ciento. En este sentido, se preveía el retroceso debido al débil comportamiento reciente en materia de construcción, manufacturas (sobre todo, automotriz) y minería, así como menor actividad en los rubros de electricidad, gas y agua.

Los resultados sectoriales a tasa anual fueron de la siguiente manera: construcción, menos 7.1 por ciento; manufacturas, menos 6.6 por ciento, derivado de la menor producción de la mayoría de las actividades que las integran, destacando caídas de la fabricación de equipo de transporte, productos a base de minerales no metálicos, industrias metálicas básicas y maquinaria y equipo, entre otros; electricidad, gas y agua cayó 5.3 por ciento, luego de 34 meses de mostrar comportamiento positivo; minería se mantuvo en terreno negativo mostrando una disminución anual de 6.7 por ciento, debido a la caída de la producción petrolera (7.3 por ciento).

Con datos desestacionalizados, el indicador registra un retroceso de 4.68 por ciento, lo que sugiere que las caídas en el indicador continuarán en los próximos meses. De hecho, los analistas esperan que la producción industrial muestre variaciones anuales negativas, siendo la más pronunciada en abril, con una contracción de 13 por ciento anual, y permaneciendo en terreno negativo hasta el final del año cuando se espera un retroceso de 4.8 por ciento anual.

Los recientes reportes de producción y exportación de automóviles en enero (caídas de 28 y 51 por ciento, respectivamente) anuncian que el panorama seguirá siendo complejo para el sector industrial.

La depreciación del peso es insuficiente para reactivar las exportaciones porque el mayor efecto sigue siendo la menor demanda en Estados Unidos. De hecho, también durante la semana pasada se confirmaba la pérdida de empleos formales en más de 128 mil de diciembre a enero, y una reducción de casi 239 mil plazas en el último año.

La caída de la producción industrial confirma que la economía mexicana se contrae más de lo esperado y sugiere que el Banco de México continuará con su política de reducción de tasas, aseguraron los analistas de Ixe.



Jornada: Venezuela

Los medios, cabeza visible de la política de desestabilización

Tv, radio y prensa, casi 90% en manos de la iniciativa privada

El funcionario integró en los años 60 la guerrilla venezolana en el estado de Falcón. Era conocido como comandante Fausto y encabezó la lucha contra el Pacto de Punto Fijo, propuesto por Rómulo Betancourt, para que AD, Copei y URN apuntalaran la naciente democracia después de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez (1952-1958)

Josetxo Zaldúa
Enviado

Caracas, 21 de febrero. Durante casi 20 años fue conocido como comandante Fausto. Era uno de los líderes de la guerrilla venezolana asentada en el estado de Falcón. De extracción comunista, Alí Rodríguez Araque (1937) se levantó en armas durante los años 60 contra el llamado Pacto de Punto Fijo, que sirvió para repartir el pastel político, y todo lo demás, entre los socialdemócratas de Acción Democrática (AD) y los socialcristianos de Copei.

Se reintegró a la política sin fusiles en 1980, pero escuchándolo, da la impresión de que continúa en la selva. Mirada escrutadora, desconfiada; mide sus palabras, tal vez porque hoy está, junto con su presidente Hugo Chávez, en el centro de las diatribas opositoras. Es ministro de Economía y Finanzas, y sus adversarios no lo bajan de ignorante, de diletante. No mueve un músculo de su enjuto rostro cuando el reportero le dice lo que afirman de él.

–¿Habrá ahora, después del referendo constitucional del domingo, un acuerdo nacional para rebajar el encono político?

–Para bailar tango hacen falta dos, y sólo veo uno. El problema que tenemos en el gobierno es que no vemos interlocutor en el bloque de oposición. Es verdad que 5 millones de venezolanos en edad de votar optaron por el no, pero no tenemos con quién hablar. Ese vacío de liderazgo político en la oposición ha sido llenado por algunos medios de comunicación, y hablo de televisión, radio y prensa escrita, que están en manos privadas y controlan casi 90 por ciento de los medios informativos nacionales. Ellos son la cabeza visible de la política de desestabilización que quieren imponer en el país.

–¿Entonces hay que descartar toda posibilidad de diálogo?

–No hay que descartar nada, o casi nada, cuando se habla de política, pero nuestro gobierno tiene un compromiso con el pueblo y lo va a cumplir. A partir del mutuo respeto, y eso es fundamental, nosotros estamos dispuestos a conversar con todos. El problema es que desde la oposición todavía no han propuesto una línea alternativa a cualquiera de nuestras políticas, a lo que nosotros hacemos.

No dejan de criticar cada paso que damos. Según ellos todo lo hacemos mal. Y esa actitud muestra una nula disposición al diálogo. Es verdad que una parte de la oposición muestra un talante más democrático, pero los que mandan, con los medios a la cabeza, son los sectores golpistas. Así no es posible dialogar.

–A tenor de sus palabras, ¿qué futuro le espera a las televisoras y las radios que, según ustedes, encabezan a la oposición golpista?

–Si usted me pregunta eso pensando en la no ampliación de la concesión a Radio Caracas Televisión, le tengo que decir que no hay que aventurar nada en esta materia. Sí, debo reconocer que a nuestro gobierno le gustaría un poco más de imparcialidad a la hora de abordar la crítica. Y no estoy hablando de objetividad, hablo de imparcialidad. Lo que está mal es que el dueño de la televisora Globovisión haya organizado la reunión, en Puerto Rico, entre la oposición venezolana y el Partido Demócrata Cristiano de Chile. Y sabemos que ahí los chilenos les dijeron cómo fue que los medios de prensa y los empresarios de ese país jugaron para derrocar al presidente Salvador Allende.

No creo que ese sea el papel de los medios de comunicación, y tampoco me parece que los medios de comunicación tengan como fin último emponzoñar la convivencia. Lo único que pedimos es más responsabilidad. Entre la gente hay un evidente clima de fatiga, de falta de confianza por la actitud de esos medios.

Alí Rodríguez, cuentan sus allegados, gustaba decir cuando estaba levantado en armas contra los cogollos (cúpulas) políticos (AD y Copei) que el objetivo de la guerrilla era dejar sus caballos a las puertas del Palacio de Miraflores. No llegó a dejar ningún caballo. Al palacio presidencial llega en un carro nada lujoso y nulamente blindado. Tratándolo da la impresión de ser un guerrillero veterano enfundado en traje de civil y pertrechado tras una pared de datos económicos y financieros.

–Cuando ustedes hablan de implantar en Venezuela el socialismo del siglo XX1, ¿de qué están hablando?

–Cada época ha tenido sus valores dominantes. Si para el capitalismo hoy en crisis el valor central era la ganancia sin importar a qué costo y a costa de quién, en el socialismo que nosotros vemos para Venezuela el valor supremo es el trabajo, es todo un sistema social más justo, basado fundamentalmente en las relaciones humanas. No estamos pensando en nacionalizar por nacionalizar. Hablamos de establecer, y lo estamos haciendo poco a poco, porque no es fácil, unas reglas de juego más equilibradas de tal modo que toda la sociedad sea beneficiada por la riqueza que general el país.

–¿Y eso cómo se hace?

–Desde la década de los años 70, ya con con boom petrolero alcanzó su máxima expresión, el Estado venezolano gozó de un caudal de ingresos que no fue capaz de manejar con inteligencia, con sensibilidad. Por eso la situación de Venezuela, país rentista por excelencia, es tan atípica. Aquí el empresariado fue formado y alimentado por los diferentes gobiernos de AD y Copei. Ha sido una suerte de ley histórica. El capitalismo venezolano es un capitalismo rentístico.

“El reto es pasar de ese estado de cosas a una economía que tenga como principio rector el valor del trabajo. Ahí está el eje de lo que llamamos ‘socialismo del siglo XXI’. Tenemos la obligación de desplegar y potenciar nuevas fuerzas productivas a fin de neutralizar la excesiva concentración poblacional en los grandes centros urbanos porque, y es algo preocupante, 93 por ciento de la población vive en las zonas urbanas. La gente vive mayoritariamente en el norte del país pese a que la mayor parte del agua está en el sur. Tenemos que revertir la tendencia.

Venezuela importa 40 por ciento de los alimentos que consume, que es mucho, y tampoco estamos mejor en otros sectores. Necesitamos restructurar el andamiaje, necesitamos un nuevo sistema financiero, tenemos que canalizar los excedentes para la construcción de viviendas dignas, a la productividad. Es urgente, también, invertir mucho más en ciencia y tecnología. No se puede hablar de socialismo sin que por medio haya una revolución cultural, un cambio de valores en la sociedad. Ahí está el reto.

–¿Qué están haciendo frente a la crisis mundial?

–No estamos mal parados y estamos seguros de que este año no habrá apretones, aunque los recortes en el gasto público ya se están analizando. Pero la reducción del gasto público en ningún caso afectará los planes de desarrollo productivo. Ahora no estamos mal pero todo dependerá de la duración de la crisis económica. Nuestra ventaja es que ahora mismo disponemos de 52 mil millones de dólares en el Fondo Nacional de Desarrollo, y todo ese dinero es para inversión productiva. Tenemos la urgente tarea de satisfacer el mercado interno.

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sábado, 21 de febrero de 2009

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Cartón: Fisgón

Jornada: Crisis

A partir de ese momento comenzó la recesión económica en México, según las cifras

Cayó el PIB 1.6% en el cuarto trimestre de 2008, reportó Inegi

Se desvaneció la fortaleza que el país había mostrado, consideraron especialistas financieros

La industria manufacturera se desplomó 4.9 por ciento y la de la construcción 4.4

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Israel Rodríguez y Juan Antonio Zúñiga

El producto interno bruto (PIB) disminuyó 1.6 por ciento en términos reales durante el cuarto trimestre de 2008, con lo que este periodo marca el inicio de una recesión económica en México. Esta contracción fue consecuencia del desempeño negativo de los sectores industrial y de servicios, los cuales tuvieron decrementos de 4.2 y 0.9 por ciento, respectivamente, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) .

Los especialistas financieros señalaron que la fortaleza que había mostrado la economía de México ante la crisis internacional se desvaneció y esperamos que las caídas persistan, al menos durante los próximos cuatro trimestres. El grupo financiero Invex estima que para todo 2009 se presente una contracción de 1.9 por ciento del PIB.

En el pasado reciente, otras caídas anteriores, en el PIB fue la de 0.1 por ciento registrada en el segundo trimestre de 2003, seguida por la del primer trimestre de 2002, cuando la economía mexicana decreció 2.3 por ciento.

El PIB de las actividades primarias (que incluyen agricultura, ganadería, aprovechamiento forestal, pesca y caza) reportó una variación anual positiva de 3.3 por ciento en el cuarto trimestre. Destacaron los mayores cultivos de aguacate, alfalfa, limón y maíz.

Por su parte, el PIB de las actividades secundarias que incluyen la minería, construcción, manufacturas y energía, registró una variación de menos 4.2 por ciento a tasa anual. En este segmento destacaron las caídas de la industria manufacturera con 4.9 por ciento y de la construcción con menos 4.4 por ciento.

Destacó la menor producción de equipo de transporte; equipo de computación y comunicación; de componentes y accesorios electrónicos.

En tanto, el PIB de las actividades terciarias (comercio y servicios) cayó 0.9 por ciento, sector que tiene un peso en el producto interno bruto de al menos 60 por ciento. En este sector destacó el deterioro del comercio con una baja de 4.8 por ciento. Los servicios inmobiliarios aumentaron; en contraparte, los servicios de transporte y los servicios financieros registraron caídas de 2.8 y 6 por ciento, respectivamente.

De no ser por la actividad del sector primario (agricultura y ganadería) la economía de México hubiera caído todavía más en el cuarto trimestre de 2008.

Los informes del Inegi señalan que la economía en México registró un crecimiento anual de 1.3 por ciento, durante todo el 2008 (contra el 3.3 de 2007) impulsado principalmente por el dinamismo de la economía registrado en la primera parte del año pasado. Por grandes grupos de actividades, el PIB de las primarias mostró un avance de 3.2 por ciento y el de las terciarias de 2.1 por ciento; mientras que las actividades secundarias se redujeron 0.7 por ciento con respecto a 2007.

Los especialistas del Grupo Financiero Invex afirmaron que considerando cifras ajustadas por estacionalidad, el deterioro más grave se observó en la parte de comercio y servicios (menos 11.94 por ciento a tasa trimestral anualizada). El PIB de México cayó a menos 10.35 por ciento a tasa trimestral anualizada si es medido de esta forma.

Situación preocupante

El hecho que la actividad haya caído a tal velocidad de un trimestre a otro sugiere que la economía del país atraviesa por una situación preocupante, señaló el analista Ricardo Aguilar Abe de Invex. Recordó que hace pocos días, la caída de más de 12 por ciento a tasa trimestral anualizada en la economía de Japón causó alarma entre los mercados. La contracción que registró nuestra economía en el mismo periodo no estuvo tan alejada.

Explicó: Debido al rezago con el que se han transmitido las caídas del sector externo hacia la actividad económica nacional, todavía esperamos un deterioro más pronunciado en el PIB del primer y segundo trimestres de 2009. La recuperación de la economía mexicana dependerá más de la reactivación de Estados Unidos que del impulso interno brindado por políticas fiscal y monetaria expansivas.

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