La prensa vendida culpa a AMLO y apoya a Los Chuchos
El columnista de El Universal Ricardo Alemán dijo: “Y es que en efecto, uno de los grandes derrotados en Guerrero fue Andrés Manuel López Obrador. Eso si no es que el objetivo hubiere sido ese: dividir al PRD para impulsar el triunfo del PRI en Guerrero. Y frente a esa realidad, el fanatismo se convertirá en insulto”.
Carlos Marín, en Milenio: “Más allá del desastre de la administración de Félix Salgado Macedonio en Acapulco y del absurdo apoyo de Andrés Manuel López Obrador al candidato ¡de Convergencia! (en vez de respaldar a la de su partido), el infarto masivo del PRD en Guerrero es consecuencia del desgreñadero en que los principales líderes están trenzados”. ¿Absurdo apoyo de AMLO, que pertenece al Frente Amplio Progresista, al candidato de dos de los tres partidos que integran el FAP?
También en Milenio, Joaquín López Dóriga expresó: “El PRD fue vencido no por el PRI, que ganó, sino por la visión de Andrés Manuel López Obrador, que se opuso a la candidatura de Gloria Sierra López y apoyó la del senador con licencia por Convergencia, Luis Walton. Pero, ¿por qué Andrés Manuel rechazó a Sierra López como candidata en Acapulco si unidos hubieran mantenido ese enclave? Pues porque era, aseguraban los suyos, la candidata del gobernador Zeferino Torreblanca, y al no estar en buenos términos con él, apoyó a otro candidato, aun yendo contra su propio partido y con el riesgo real y comprobado en los antecedentes, de salir derrotado… Y por eso; por eso y por obsesión de un caudillo que insiste en que es él o el desastre.
Y en Acapulco fue lo segundo”. ¿Le resultaría muy difícil a López Dóriga entender que AMLO no podía dejar de apoyar al candidato, Luis Walton, postulado por dos de los tres partidos del Frente Amplio Progresista? Digo, no se necesita mucho cerebro para comprender algo tan sencillo.
Por lo demás, periodista crítico con todos, al finalizar su columna López Dóriga elogió en exceso a la esposa de Felipe Calderón, doña Margarita Zavala. No venía a caso elogiarla, pero Joaquín tenía que cumplir su cuota de zalamería.
Hay muchos otros ejemplos en la prensa mexicana de culpar a AMLO por algo que hicieron Los Chuchos: dividir a la izquierda en Guerrero. El más chistoso es el texto que el Chucho mayor, Jesús Ortega, publicó en Excélsior titulado “¡Lo hemos logrado: perdimos en Guerrero!”. Sin atreverse a mencionar el nombre de Andrés Manuel López Obrador, lo critica. Después, admite lo que es obvio: que el PRD perdió las elecciones del domingo pasado. No reconoce lo más importante: que en la principal ciudad guerrerense, Acapulco, el PRD se fue al tercer lugar con la mala candidata chuchista que este partido postuló. Dice Ortega: “Pero lo más importante es que la elección de Guerrero nos sirva a nivel nacional y, a partir de ello, abramos los oídos para que escuchemos lo que los ciudadanos nos están gritando”.
Ojalá que Los Chuchos escuchen el grito de los ciudadanos de izquierda, que es uno y que no tiene nada que ver con lo publicado en la prensa vendida: que Los Chuchos, esto es, Ortega, Navarrete, Acosta, Zavaleta, liberen al PRD, partido al que secuestraron sólo para llevarlo al fracaso. Como en Guerrero, sí.