lunes, 10 de noviembre de 2008

Milenio: EUA

Herida y temerosa de la bancarrota, se desploma General Motors

Las ventas de coches nuevos se derrumbaron en octubre pasado en un 32 por ciento a su nivel más bajo desde octubre de 1991, al tiempo que las compañías continuaban perdiendo dinero y despidiendo personal.

Nueva York.-- El valor de las acciones de General Motors cayó hoy un 31 por ciento, después de que un informe de Deutsche Bank redujera la meta de cotización de sus títulos a casi cero para dentro de un año.

"Aun cuando GM pudiera prevenir la insolvencia (con ayuda del Estado), creemos que el futuro de la compañía es probablemente similar a una bancarrota", dijo el analista de Deutsche Bank Rod Lache.

La advertencia llega pocos días después de que General Motors, la automotriz más grande de Estados Unidos, dijera que estaba quedándose sin el mínimo de efectivo necesario para operar hasta finales de año, y que las pérdidas operativas durante el tercer trimestre alcanzaran los 4.200 millones de dólares. GM advirtió el viernes que, sin ayuda estatal, a lo mejor entraría en quiebra a mitad del 2009.

Ya en la primera hora de negociación de Wall Street se derrumbaron las acciones de GM en un 25 por ciento para quedar en 3,27 dólares.

Líderes del Congreso se sumaron el sábado al llamado de Barack Obama para respaldar la industria automotriz, y enviaron una carta al secretario del Tesoro Henry Paulson solicitando ayuda para el sector.

La Casa Blanca dijo hoy que el Departamento del Tesoro todavía está estudiando el contenido del escrito, añadiendo que el Congreso tendrá la semana entrante la oportunidad de solicitar ayuda adicional cuando retome los debates.

"Atenderemos con seguridad las ideas que tengan acerca de cómo acelerar los préstamos a compañías viables, según consta en la legislación", dijo Dana Perino, la presidenta de la Cámara de Representantes.

La industria automotriz ya obtuvo un préstamo por 25.000 millones de dólares para el desarrollo de tecnologías ecológicas, y líderes del Congreso han estado discutiendo para intentar obtener otros 25.000 milones de dólares hasta finales de este año.

Las ventas de coches nuevos se derrumbaron en octubre pasado en un 32 por ciento a su nivel más bajo desde octubre de 1991, al tiempo que las compañías continuaban perdiendo dinero y despidiendo personal.

Ford, la tercera empresa automotriz del país, anunció la semana pasada pérdidas por 2.980 millones de dólares durante el tercer trimestre, y anunció que eliminaría empleos y reduciría gastos para conservar sus escasas reservas de efectivo.

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Jornada: EUA

■ Escriben al secretario del Tesoro para que le destine parte de los 700 mil millones de dólares

Líderes del Congreso de EU piden usar parte del rescate financiero para el sector automotriz

■ Estamos convencidos de que las empresas y los empleos del rubro corren peligro, señalan

Dpa

Washington, 9 de noviembre. Líderes del Congreso se unieron al presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, en un llamado para socorrer a la industria automovilística, al enviar una carta al secretario del Tesoro, Henry Paulson, para obtener dinero del plan de rescate financiero de 700 mil millones de dólares. En tanto, el jefe del equipo de Obama pidió una acción urgente para ayudar a la industria automotriz, amenazada por ventas decrecientes, reducción de empleos y falta de crédito.

“Washington tiene que pensar en entregar rápidamente los 25 mil millones de dólares previstos para reformar las fábricas, básicamente para tener un parque automotor más eficiente en el consumo de combustible”, declaró el legislador Rahm Emanuel a la cadena CBS.

“Un sector automovilístico sano es esencial para la restauración de la estabilidad del mercado financiero, la salud general de nuestra economía y el sustento de la fuerza laboral del sector”, afirmaron la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el líder de la mayoría del Senado, Harry Reid, ambos demócratas.

El viernes, Obama llamó a la industria del automóvil la “columna vertebral de las manufacturas estadunidenses”, con lo cual dio indicios de querer ayudar al sector durante su mandato, que comienza el 20 de enero.

El jueves, los ejecutivos jefes de los tres principales fabricantes de automóviles de Estados Unidos –General Motors, Ford y Chrysler– se reunieron hoy con Pelosi y Reid para discutir un próximo paquete de rescate financiero y el futuro de la industria. También asistió el presidente del sindicato United Auto Workers, Ronald Gettelfinger.

Los ejecutivos de las firmas también pidieron otro préstamo al gobierno, además del ya aprobado de 25 mil millones de dólares, para desarrollar coches con baja emisión de carbono.

“Salimos de la reunión convencidos de que nuestra industria automovilística –el corazón del sector manufacturero– y los empleos de decenas de miles de trabajadores estadunidenses corren peligro”, escribieron hoy Pelosi y Reid.

Pidieron a Paulson “revisar la viabilidad” de usar parte de los 700 mil millones de dólares para otorgar “asistencia temporal” durante la crisis financiera. El viernes, Ford y General Motors reportaron fuertes pérdidas en el tercer trimestre, mientras la industria sigue eliminando empleos.

Ford sufrió en el tercer trimestre pérdidas después de impuestos de casi 3 mil millones de dólares (unos 2 mil 300 millones de euros).

Ante esta situación, Ford tiene previsto eliminar alrededor de diez por ciento de empleos. Ante la crisis, cada vez son más los rumores que apuntan hacia la insolvencia. El trimestre pasado la compañía ya gastó 7 mil 700 millones de dólares de sus reservas de capital.

GM dio a conocer hoy unas pérdidas de 4 mil 200 millones de dólares (3 mil 300 millones de euros) en el tercer trimestre. La crisis del sector no sólo afecta a las firmas, sino también a proveedores, pequeñas firmas y comunidades que dependen de ellas, afirmó Obama el viernes.

Específicamente anunció que pidió a su equipo de transición que diseñe medidas para “ayudar a la industria automotriz a ajustarse, superar la crisis y tener éxito en producir coches de consumo eficiente”. Oficialmente, la economía estadunidense entró en crecimiento negativo, según informó el gobierno la semana pasada.

Jornada: Rayuela

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