Andrés Manuel López Obrador avalaría una única propuesta de reforma energética. No la del PRD, la de Convergencia o la del PT. Tampoco la que pudieran elaborar los senadores o diputados de estos partidos. Es otra la iniciativa que AMLO apoyaría, desde luego sin participar en su redacción y, conociendo al presidente legítimo, inclusive sin verla: la que produzcan los intelectuales que se han involucrado en la defensa del petróleo y los ponentes que representaron al Frente Amplio Progresista en los recientes debates en el Senado de la República.
Eso fue lo que López Obrador informó, el pasado lunes, a los integrantes del consejo político del gobierno legítimo con quienes se reúne cada semana.Por supuesto, no podía faltar la navarretada. El senador Carlos Navarrete, en cuanto escuchó lo anterior, gritó: “¿¡Y qué sabe Monsiváis del petróleo!?”. Yo respondería: por lo menos el triple de lo que sepa Navarrete. Si no por otra cosa, porque Monsiváis es un hombre extraordinariamente culto, y Navarrete está muy lejos de eso.
Tal es la razón, se especula en círculos políticos, de que el dirigente interino del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, haya anunciado ayer a las carreras que ya está casi lista la propuesta del PRD, que será presentada el 15 de agosto. Es decir, han intentado un madruguete los perredistas partidarios de la negociación o la transa
¿Por qué AMLO no avala lo que ha hecho el PRD? Lo dijo el lunes: porque no puede estar de acuerdo con un arreglo cupular como el que Acosta Naranjo pactó con los líderes del PRI y del PAN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario